Imbuidos en el poder societal, fundidos en el grupo y carentes de todo procedimiento particular y de razonamiento propio actuamos como robots en un mundo gobernado por unos pocos que ignorantes tratan de coartar la libertar indeleble del humano. Leyes y prohibiciones para unos padres que han traído a ese Ser desde si mismos con su propia voluntad y siendo éstos quien mejor conocen y sienten la situación de su hija. Deberíamos preguntarnos que pasaría si esto hubiera pasado en un lugar salvaje, la naturaleza ya hubiera obrado hace tiempo y el poder divino ejecutado sin mayor dilación que la fluidez de la vida. Vivimos en un mundo artificial, un mundo que se asemeja mas a una prisión que a un planeta libre, ya no es cuestión de debatir o no si es correcto o incorrecto, es cuestión de ser humanos y actuar por la siempre certeza de nuestro Ser interno que nos guiará en los puntos de inflexión de nuestra vida, mas allá de leyes, de ética o de moral.
Imbuidos en el poder societal, fundidos en el grupo y carentes de todo procedimiento particular y de razonamiento propio actuamos como robots en un mundo gobernado por unos pocos que ignorantes tratan de coartar la libertar indeleble del humano. Leyes y prohibiciones para unos padres que han traído a ese Ser desde si mismos con su propia voluntad y siendo éstos quien mejor conocen y sienten la situación de su hija. Deberíamos preguntarnos que pasaría si esto hubiera pasado en un lugar salvaje, la naturaleza ya hubiera obrado hace tiempo y el poder divino ejecutado sin mayor dilación que la fluidez de la vida. Vivimos en un mundo artificial, un mundo que se asemeja mas a una prisión que a un planeta libre, ya no es cuestión de debatir o no si es correcto o incorrecto, es cuestión de ser humanos y actuar por la siempre certeza de nuestro Ser interno que nos guiará en los puntos de inflexión de nuestra vida, mas allá de leyes, de ética o de moral.
ResponderEliminarMoisés Rst.